foto del día: los Mexicanos

A los maestros del baile y a los danzantes se les debe proveer, según la tradición: el traje, alimentos, marimba y el traguito de licor. La actividad puede durar hasta quince días .
Los residentes de Momostenango expresan su religiosidad, necesidades y alegría a través del baile. A lo largo de su historia, han acumulado danzas para cada ocasión que puede ser la siembra del maíz o los festejos del santo patrón. Cada generación encuentra la manera de solicitar a sus dioses un buen año, una cosecha abundante y la estabilidad y prosperidad familiar.
El baile de los mexicanos se acostumbra en la ciudad de Momostenango y en los municipios vecinos de San Cristóbal así como en San Francisco El Alto.
Los estudiosos de las tradiciones han puntualizado que los bailes que se aprecian en Momostenango nacen de raíces antiguas, que datan de la historia precolonial a la cual se sumaron las influencias religiosas de los misioneros franciscanos desde 1541.
El baile de los mexicanos se presenta durante los festejos al patrono de Momostenango, Santiago Apostol, durante la última semana de junio y primera semana de agosto.
El visitante que acude al parque Central de Momostenango en cualquiera de esas fechas, observa una parte del ritual. Previo a la presentación pública, el que patrocina la danza, organiza ceremonias religiosas para ofrendar la actividad a sus dioses y garantizar una buena cosecha con un año sin problemas. Recordemos, dice el director de la Casa de la Cultura , que originalmente eran una cofradía.
El baile puede durar hasta cuatro días, dependiendo de la organización y la ofrenda que se hace. Los maestros del baile y los danzantes deben ser tratados según la tradición: proveerles del traje, sus alimentos, marimba y el traguito de licor.
Los bailarines son hombres que interpretan el rol de hombres y mujeres. Sus diálogos usualmente son ”bromas que se hacen unos a otros. Ríen, gozan, entre ellos y son acompañados por una marimba tradicional de un teclado”.
HistoriaUn estudio elaborado por Demetrio E. Brisset, bajo el auspicio de la Universidad de Barcelona, señala que el ritual de los bailes en América Latina se manifiesta en tres lugares: Los Andes, Guatemala y México.
Los frailes franciscanos, dice Brisset, “encabezados por Fray Toribio de Benavente, evangelizan a los indígenas y sustituyen los símbolos prehispánicos por los católicos” desde su arribo a la Colonia en 1541. Una tradición de 468 años que, con las variaciones de cada generación, hoy día aún se pueden apreciar, en las calles de Momostenango
Fuente: dca.gob.gt